Por qué contratar un servicio de hosting y un dominio?
Existen diferentes páginas web, millones de ellas, cuyos orígenes son de todo el mundo. Pero todas tienen algo en común, necesitan un espacio donde alojarse para poder ser vistas por los seguidores. Ese espacio que usan en Internet se le denomina alojamiento web. A su vez cada una de las páginas tiene su propio nombre seguida por una extensión que puede ser punto com, net, org, info, co, es, mx o ar, entre otros, lo que se denomina dominio.
Una página web necesita hosting y dominio propio
Al crear una página web es necesario contratar un hosting de Raiola Networks, y también un dominio. El dominio no sólo es el nombre de la página web, sino que es la dirección con la que los usuarios, clientes o visitantes pueden encontrar el sitio al escribirla en los distintos navegadores.
El hosting o alojamiento web es el espacio que ocupa la página en la red. Este espacio tiene el espacio suficiente para alojar todos los recursos que son necesarios para su accesibilidad. Los espacios son compartidos, por páginas de otros usuarios, cuyos contenidos se alojan en el servidor del proveedor del alojamiento o hosting, que está conectado las 24 horas por día durante todo el año.
Los usuarios no son perjudicados por compartir servidor, pues cada cuenta está debidamente aislada de las demás, para que no puedan afectarse entre sí, cada una es un hosting y dominio diferente, con su memoria RAM, su espacio web, uso de CPU y la transferencia mensual.
En el alojamiento compartido, el cliente se ocupa de mantener actualizada su página, que esté bien posicionada con una buena estrategia de SEO, y de contar con una buena difusión para que pueda ser vista por muchos usuarios, mientras que el proveedor del hosting, se hace cargo del mantenimiento del servidor, de su seguridad, de mantener el software actualizado, además de que la conexión a Internet sea estable y permanente. También el proveedor hosting realiza copias de seguridad o backups de los contenidos, para que sus clientes tengan copias de respaldo por cualquier problema que pueda ocurrir.
Los mejores servidores de hosting tienen alojamiento web SSD
El alojamiento web SSD consiste en la utilización de discos de estado sólido, para almacenar los alojamientos web. La diferencia de utilizar esta tecnología con la de los tradicionales HDD, es que los de estado sólido no utilizan piezas mecánicas, propensas a tener fallos o desgastes.
Gracias a esta carencia de piezas móviles, se gana mucho en velocidad, pues los discos SSD pueden llegar a ser cuatro veces más rápidos que los tradicionales discos duros. Cuando más se nota es con el uso de gestores como PrestaShop o WordPress, que precisan frecuentes consultas en las bases de datos.
El SSD es más caro, pero es más veloz y durable. Los buenos servidores de hosting utilizan la tecnología SSD, pues les da mayor seguridad, más velocidad en las respuestas, y su filosofía es que los usuarios merecen tal inversión porque reciben un mejor servicio.
Para mantener aisladas las cuentas de los clientes, los proveedores de hostings tienen programas especiales instalados en cada servidor SSD, de forma que cada hosting tiene su propio uso de CPU, memoria RAM, como si cada cuenta estuviera alojada en un servidor independiente de las demás, y no en uno compartido.
Las empresas proveedoras, con estos servidores y la utilización de programas especiales, garantizan la estabilidad, la seguridad y la eficiencia en sus espacios hostings. Si por ejemplo una de las cuentas alojadas en el servidor sufriera un ataque, ninguna otra cuenta sería afectada.
Muchas de estas empresas proveedoras de hostings tienen direcciones IP geolocalizadas y pueden dar direcciones IP españolas, para que el posicionamiento web sea óptimo, pues algunos algoritmos que utilizan los motores de búsqueda, suelen darle prioridad a las direcciones IP locales.
¿Cómo elegir el mejor hosting para una web?
Para elegir el alojamiento web más conveniente para un emprendimiento, los proveedores tienen equipos de trabajo dedicados al asesoramiento de clientes, para conocer las necesidades de cada cliente y ofrecerles el que mejor se adecúa a las necesidades. Si el emprendimiento creciera, y fuese necesario un plan superior, los planes son escalables, y se puede ascender a uno superior sin ningún problema.
Es decir, si la página a crear es para un proyecto pequeño y personal, se debe empezar por un plan básico de hosting, pues al no tener muchas visitas al principio, será suficiente y saldrá más económico. Si la web a crear o una ya creada comienza a crecer y a transformarse en algo más importante, hay que contratar un paquete de hosting intermedio, para que alcance y no quedarse a medio camino. Cuando se trate de un negocio en línea y las visitas sean numerosas, los paquetes de hosting avanzados son los más adecuados.
Puede darse el caso de que un cliente haya comprado un dominio en Internet pero ya tenga una dirección IP propia. Si esto sucede, puede tenerlo como propiedad hasta que decida contratar un servicio de hosting, desde el mismo panel del proveedor hosting que contrate, gestiona el alojamiento, transfiriendo el dominio al proveedor elegido.
Otro caso que puede suceder es que se prefiera cambiar el hosting de proveedor, cuando ya se tiene en funcionamiento una página web. Las empresas proveedoras de hostings suelen ofrecer, realizar la migración de forma totalmente gratuita. Generalmente, ofrecen la migración de varias webs y más de tres cuentas de email, sin cargo, sólo por contratar hostings y elegir sus servicios como proveedor.
Este tipo de migración de un proveedor de hosting a otro, se debe solicitar 30 días después de contratar el servicio nuevo, y el proceso migratorio suele demorar varios días hábiles.
Los soportes técnicos que son ofrecidos al cliente por parte de estas empresas proveedoras de hosting, cubren las 24 horas durante los 365 días del año, atendido por técnicos especializados totalmente capacitados para dar la solución a los problemas que pudieran surgir en cualquier momento.